Existe una gran diferencia entre pasarse la tarde tomando infinidad de copas en un bar y dedicarla a realizar ejercicio físico moderado
Ya estamos de nuevo en un bando o en otro, unos tomando copas y gastando el jornal del día y otros como locos sudando y levantando pesas o realizando ejercicios aeróbicos sin parar en el gimnasio.
Por mi profesión puedo deciros que siempre lo segundo es más recomendable y saludable para nuestro organismo que lo primero y para nuestro bolsillo también, pero cuidado con no obsesionarse.
Los tópicos publicitarios incitan a la gente de un modo engañoso a ir a los gimnasios dos o tres meses antes de los momentos clave, antes del verano conocido como "operación bikini", o después de los excesos navideños. Esta obsesión por la estética provoca que los usuarios se pongan a realizar deporte por su cuenta sin ningun tipo de supervisión ni control a una intensidad muy superior a la que podrian realizar con seguridad.
Los tópicos publicitarios incitan a la gente de un modo engañoso a ir a los gimnasios dos o tres meses antes de los momentos clave, antes del verano o después de los excesos navideños
No debemos de olvidar que lo recomendable por los especialistas, médicos, cardiólogos, preparadores deportivos, etc... es realizar actividad física de una manera rutinaria y de forma moderada. Si queremos ver resultados pronto solo existe una solución, la de pasar por el quirófano y yo por mi parte no recomendaría a nadie pasar por él salvo necesidad imperiosa, valga decir que es solo mi opinión.
Otro factor importante a tener en cuenta es el factor genético, algo que muchas personas no le dan importancia y lo pasan por alto a la hora de someterse a una preparacion física, pero que marcará nuestras opciones en nuestra carrera por tener un físico portentoso y atractivo para los demás.
No debemos olvidar que cada uno puede mejorar pero solo respecto a lo que tiene, y no realizando comparaciones con los que nos rodean. Al obsesionarnos con conseguir un objetivo concreto perdemos el fin de realizar deporte, que es que nuestro organismo se regule mejor, nuestro corazón, nuestro sistema musculoesquelético, nuestro sistema nervioso, etc...
¡Hagan deporte, pero no dejen que el bombardeo publicitario frustre sus ilusiones!
Ya estamos de nuevo en un bando o en otro, unos tomando copas y gastando el jornal del día y otros como locos sudando y levantando pesas o realizando ejercicios aeróbicos sin parar en el gimnasio.
Por mi profesión puedo deciros que siempre lo segundo es más recomendable y saludable para nuestro organismo que lo primero y para nuestro bolsillo también, pero cuidado con no obsesionarse.
Los tópicos publicitarios incitan a la gente de un modo engañoso a ir a los gimnasios dos o tres meses antes de los momentos clave, antes del verano conocido como "operación bikini", o después de los excesos navideños. Esta obsesión por la estética provoca que los usuarios se pongan a realizar deporte por su cuenta sin ningun tipo de supervisión ni control a una intensidad muy superior a la que podrian realizar con seguridad.
Los tópicos publicitarios incitan a la gente de un modo engañoso a ir a los gimnasios dos o tres meses antes de los momentos clave, antes del verano o después de los excesos navideños
No debemos de olvidar que lo recomendable por los especialistas, médicos, cardiólogos, preparadores deportivos, etc... es realizar actividad física de una manera rutinaria y de forma moderada. Si queremos ver resultados pronto solo existe una solución, la de pasar por el quirófano y yo por mi parte no recomendaría a nadie pasar por él salvo necesidad imperiosa, valga decir que es solo mi opinión.
Otro factor importante a tener en cuenta es el factor genético, algo que muchas personas no le dan importancia y lo pasan por alto a la hora de someterse a una preparacion física, pero que marcará nuestras opciones en nuestra carrera por tener un físico portentoso y atractivo para los demás.
No debemos olvidar que cada uno puede mejorar pero solo respecto a lo que tiene, y no realizando comparaciones con los que nos rodean. Al obsesionarnos con conseguir un objetivo concreto perdemos el fin de realizar deporte, que es que nuestro organismo se regule mejor, nuestro corazón, nuestro sistema musculoesquelético, nuestro sistema nervioso, etc...
¡Hagan deporte, pero no dejen que el bombardeo publicitario frustre sus ilusiones!
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